Becarios ilustres: el ejemplo de Mariel Vázquez
Apasionada de la biología molecular desde la preparatoria, a Mariel también le gustaban muchísimo las matemáticas pero no sabía cómo combinar ambos campos del conocimiento. Finalmente, se decidió por estudiar la carrera de matemáticas en la Facultad de Ciencias y se convirtió en becaria del Instituto, pensando en que al tener más interés en las matemáticas puras se alejaba cada vez más de la biología. Un día, mientras estudiaba el segundo año de la carrera, se encontró con un cartel que anunciaba una serie de conferencias que De Witt Sumners impartiría sobre aplicaciones de las matemáticas —en especial, de la topología— al estudio del ADN. Dicho encuentro, en palabras de la propia Mariel, la hizo entender hacia dónde quería dirigir su vida académica.
Desde entonces, el camino interdisciplinario que abordó le tendría reservados muchos éxitos. Así, en 1994 presentó en el XXVII Congreso Nacional organizado por la Sociedad Matemática Mexicana y realizado en la ciudad de Querétaro, la ponencia “Nudos y ADN”. Se graduó en 1995 con la tesis “Aplicaciones de la teoría de nudos al estudio del ADN” dirigida por el Dr. Max Neumann. Entre 1997 y 1998, impartió diversas conferencias sobre este tema, tanto en el Instituto, como en el CIMAT Guanajuato y en la sesión especial de Geometría diferencial y topología del Encuentro AMS-SMM en Oaxaca. Mariel obtuvo su doctorado en matemáticas en la Universidad de Florida dirigida por De Witt Sumners en 2000, usando modelos de la Teoría de Nudos (ovillos) para tratar de entender la forma en que las enzimas cambian la topología del ADN cerrado. Luego realizó estudios posdoctorales en la Universidad de California, Berkeley y, finalmente, obtendría una posición de profesora en la Universidad Estatal de San Francisco, donde trabaja hasta la fecha.
El trabajo de Vázquez está relacionado con entender cómo el ADN está empacado en la célula; dicha investigación usando sofisticas herramientas matemáticas es crucial para comprender a los seres vivos y podría, por ejemplo, afectar el diseño de antibióticos y medicamentos usados para el tratamiento del cáncer. Además, Mariel está comprometida con enseñar a los jóvenes y niños cómo las matemáticas sirven para resolver problemas cotidianos e imparte clases y cursos para ellos en San Francisco.
Por todo lo anterior y dada su trayectoria académica —en la que ha recibido ya diversas distinciones—, la National Science Foundations la nominó para recibir el 23 de julio de 2012 el Presidential Early Career Award for Scientists and Engineers (PECASE), máximo reconocimiento destinado a jóvenes científicos en Estados Unidos.
La comunidad del Instituto se une a la felicitación para Mariel Vázquez y confía en que su ejemplo sirva de estímulo a todos nuestros becarios.
Para más información, puede consultar aquí y acá; también está disponible la nota en la Universidad de San Francisco.